El retrorunning es una nueva disciplina deportiva que está en auge en los últimos años. Ya lo podemos ver hasta en la televisión y las noticias, pero pocos conocen por qué este tipo de carrera está tan de moda. Aquí os lo explico.
El retrorunning es una alternativa de entrenamiento que reduce el impacto agresivo que la carrera convencional nos produce en las articulaciones y consiste en correr hacia atrás, de espaldas. Correr hacia atrás nos supone un entrenamiento más intenso, reduce el riesgo de lesiones en la espalda y en las piernas y es una alternativa para perder peso de forma rápida, pues con el retrorunning se queman más calorías.
El retrorunning tiene numerosos beneficios, que iré enumerando a continuación. Lo principal es que ejercita más músculos, sobre todo los cuádriceps. Una sola vuelta de retrorunning equivale a 6 vueltas de carrera hacia delante, por lo que se queman muchas más calorías y es muy beneficioso para quien quiera bajar de peso de forma rápida. Se queman hasta un 30% más de calorías.
Correr hacia delante provoca en muchas ocasiones problemas en las rodillas, pero el retrorunning, al ser una acción inversa, tiene efectos neutralizadores. Otro beneficio es la prevención y reducción de lesiones. En la carrera convencional lo primero que entra en contacto con el suelo son los talones y las rodillas actúan como amortiguadores. Sin embargo, el retrorunning reduce ese impacto y nos sirve para reducir las lesiones.
Además, es un ejercicio muy bueno para rehabilitar la rodilla, pues correr hacia atrás reduce al mínimo el impacto en la rodilla, y fortalece los músculos laterales de la rodilla. A todo este se le suma el no tener que depender de la vista, por lo que se mejora la visión periférica, se desarrollan otros sentidos como el oído y se desarrolla el equilibrio corporal.
Al correr hacia atrás, se desarrollan los músculos abdominales y la zona lumbar se relaja. Al implicar una postura más erguida, el retrorunning es bueno para la espalda y las vértebras.
El retrorunning también cuenta con inconvenientes. No debería realizarse durante un periodo prolongado de tiempo ni en cintas, pues al estar en movimiento puede provocar caídas y lesiones.
El retrornning nos permite salir de la rutina, y nos vendrá bien practicarlo de vez en cuando. Puede resultar divertido, además de todos los beneficios anterior. Y si lo que te gusta es competir, también puedes hacerlo en esta disciplina.
